¿Sabía que el uso de vibraciones acústicas (sonido) ha sido una práctica eficaz y bien aceptada para fluidificar el polvo y las partículas aglomeradas no deseadas en los equipos de control de la contaminación atmosférica y de proceso?
Las vibraciones acústicas se producen con equipos conocidos como bocinas sónicas y se ha comprobado que son especialmente útiles en los filtros de mangas de aire reversible y de sacudida. Por lo general, las bocinas sónicas utilizadas en las operaciones de los filtros de mangas funcionan produciendo energía acústica de baja frecuencia y altos decibelios, es decir, sonido en el rango de 60 a 250 Hz, con intensidades de hasta 150 dB. Las bocinas sónicas suelen ser más capaces de desalojar el polvo y las partículas con mayor eficacia a bajas frecuencias.